segunda-feira, 15 de outubro de 2012

Pablo Neruda - Desexpediente / Desespediente

-->


Pablo Neruda

Desexpediente

A pomba está cheia de papéis caídos,
seu peito está manchado por borrachas e semanas,
por mata-borrões mais brancos que um cadáver
e tintas assustadas de sua cor sinistra.

Venha comigo à sombra das administrações,
à débil, delicada cor pálida dos chefes,
aos túneis profundos como calendários,
à dolente roda de mil páginas.

Agora examinaremos os títulos e as condições,
às atas especiais, os zelos,
as demandas com seus dentes de outono nauseante,
a fúria de cinzentos destinos e tristes decisões.

É um relato de ossos feridos,
amargas circunstâncias e intermináveis trajes,
e médias repentinamente sérias,
É a noite profunda, a cabeça sem veias
de onde de repete cai o dia
como de uma garrafa rompida por um raio.

São os pés e os relógios e os dedos
e uma locomotiva de sabão moribundo,
e um céu azedo de metal molhado,
e um rio amarelo de sorrisos.

Tudo chega a ponta dos dedos como flores,
a unhas como raios, a sofás murchos,
tudo chega à tinta da morte
e à boca violeta dos timbres.

Choraremos o óbito da terra e o fogo,
as espadas, as uvas,
os sexos com seus duros domínios de raízes,
as naves do álcool navegando entre naves
e o perfume que baila de noite, de joelhos,
arrastando um planeta de rosas perfuradas.

Com um traje de cão e uma mancha na frente
vamos cair à profundidade dos papeis,
à ira das palavras encadeadas,
à manifestações tenazmente defuntas,
à sistemas envoltos em folhas amarelas.

Rode comigo pelos escritórios, sem rumo
cheiro de ministérios, e tumbas, e carimbos,
Venha comigo ao dia branco que morre
dando gritos de noiva assassinada.


Trad. livre: LdeM



Pablo Neruda


Desespediente

La paloma está llena de papeles caídos,
su pecho está manchado por gomas y semanas,
por secantes más blancos que un cadáver
y tintas asustadas de su color siniestro.

Ven conmigo a la sombra de las administraciones,
al débil, delicado color pálido de los jefes,
a los túneles profundos como calendarios,
a la doliente rueda de mil páginas.

Examinaremos ahora los títulos y las condiciones,
las actas especiales, los desvelos,
las demandas con sus dientes de otoño nauseabundo,
la furia de cenicientos destinos y tristes decisiones.

Es un relato de huesos heridos,
amargas circunstancias e interminables trajes,
y medias repentinamente serias.
Es la noche profunda, la cabeza sin venas
de donde cae el día de repente
como de una botella rota por un relámpago.
Son los pies y los relojes y los dedos
y una locomotora de jabón moribundo,
y un agrio cielo de metal mojado,
y un amarillo río de sonrisas.

Todo llega a la punta de dedos como flores,
a uñas como relámpagos, a sillones marchitos,
todo llega a la tinta de la muerte
y a la boca violeta de los timbres.
Lloremos la defunción de la tierra y el fuego,
las espadas, las uvas,
los sexos con sus duros dominios de raíces,
las naves del alcohol navegando entre naves
y el perfume que baila de noche, de rodillas,
arrastrando un planeta de rosas perforadas.

Con un traje de perro y una mancha en la frente
caigamos a la profundidad de los papeles,
a la ira de las palabras encadenadas,
a manifestaciones tenazmente difuntas,
a sistemas envueltos en amarillas hojas.

Rodad conmigo a las oficinas, al incierto
olor de ministerios, y tumbas, y estampillas.
Venid conmigo al día blanco que se muere
dando gritos de novia asesinada.



in: Residencia em la Tierra / 1925-35


mais poemas de Pablo Neruda





Um comentário: